Despertamos.
Nos sacaron de la mano a pasear y nos
enseñaron un paisaje nuevo de vida y libertad.
Nos dejamos conducir ilusionados a un
lugar desconocido donde, nos dijeron, brotaba la alegría de vivir en
amor y compañía.
Donde era evidente la comprensión de
vivir en sociedad.
Nos contaron que la bondad natural de
los humanos haría innecesario el corsé de la ley dictada.
Que no echaríamos en falta la
generosidad porque no habría necesidad que atender.
Que seríamos dueños de diseñar
nuestra vida en común.
Pero nos ocultaron la verdad.
No nos dijeron que el egoísmo natural
camparía por sus respetos.
Que seríamos pasto de la codicia de
los listos.
Nos parasitaron.
Camuflaron la macabra estructura que
forjaron para solver de nuestro esfuerzo su propia supervivencia.
Y nos sentimos estafados.
No solo despojaron nuestra hacienda,
también nos azuzaron los unos a los otros obligándonos a viajar en
partidos enfrentados.
Ahora, ya instalados, vienen a salvarnos.
A uniformarnos en defensa de caducados
intereses.
Recrean un mundo que confunde la
igualdad con la equidad.
Diseñan sendas fracasadas para
imponer conductas dirigidas.
Y el precio es la libertad.
Nuestros hijos crecerán de nuevo en un
mundo mil veces repetido.
Donde comportamientos zombis pasearán
en un patio carcelero al sol de la mañana.
O sentados a la sombra protectora del
Estado como locos drogados que miran sin ver la realidad.
Tapiarán la única ventana que tiene
el alma de verse libre del claustro social que la atenaza.
Tendremos que volver a soñar.
El sueño es la única ilusión del que
no tiene esperanza.
Es posible y hasta probable que desde la ciega indignación nos vuelvan a llevar al fracaso, pero jamás hay que poner la venda antes de que se produzca la herida.La esperanza en un mundo mejor lleva siglos siendo una utopía maravillosa pero estamos condenados a seguir buscándola una y otra vez, no nos queda otra.Y,a pesar de lo que muchos piensan, el hacer realidad esa utopía es posible siempre y cuando seamos todos y no unos cuantos los que empujemos en la buena dirección.
ResponderEliminar¿Podemos? No lo sé.Solo sé que hay que seguir intentándolo siempre.
Saludos.
Podemos o no podemos...He aquí el dilema del hombre desilusionado, acorralado,rendido al fatalismo.
ResponderEliminar¿Eres tú, Luis, quien ha escrito esto?...¿Eres tú ese hombre que "tapia la única ventana que tiene el alma de verse libre"?...
Estoy de acuerdo con Joaquín: "estamos condenados a buscar la utopía" porque es esa búsqueda la que nos da la dignidad de ser humanos.
"Podemos" puede ser un sueño, pero como dice tu penúltimo verso:
"Tendremos que volver a soñar".
¿Qué medicina despreciaría un enfermo para buscar su curación?
Podemos, Luis. "Torres más altas han caído".
Un abrazo.
Luis, creo que su texto es realista y coincido con él. Podemos buscar la utopìa e ilusionarnos, podemos seguir creyendo que cualquier partido polìtico es una opciòn polìtica y no una estafa para provecho de algunos, podemos seguir jugando a "si somos todos los que nos unimos, esto cambiarà", podemos... pero es irreal e ilusiorio como asì demuestra la historia de la humanidad. No podemos eliminar la parte codiciosa del ser humano, ni su vanidad ni sus ganas de poder y gloria. Podemos creer en los santos que eistan eso ya es "harina de otro costal.
ResponderEliminarUn saludo.
Anónimo, la parte realista del texto es la primera; lo ya visto y vivido, pero no se puede hablar de realismo futuro. Pronunciarse sobre el futuro es una suposición y, en este caso nihilista.
ResponderEliminarY olvidas que la historia de la humanidad tiene páginas sobre la fuerza de la unidad como motor de cambios.
Cruzarnos de brazos, rendirnos al caos, es la peor de las opciones. Dice A.Camus en uno de sus libros:
" Si ellos mandan es porque tú obedeces".
Luis, la sociedad ideal no existe por los motivos que expones, pero entre el ideal y el caos actual, caben otras posibilidades.¿Qué vas a hacer? ¿cruzarte de brazos, atrincherarte en tu jardín? Tal vez tú puedes hacerlo, pero hay millones de personas que no.
Un abrazo para el Anónimo y otro para ti.
Entonces.....¿cada uno a lo suyo y sálvese quién pueda? Si la historia de la humanida hubiera hubiera sido así, no habría habido historia.
ResponderEliminarUn saludo.
Ha habido historia...de traicionas, manipulaciones y efectos òpticos. Ha habido siempre personas que imaginan un futuro mejor y unas y otras hacen la historia. Siempre igual en los diferentes tiempos.
ResponderEliminarUn saludo.