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15 de noviembre de 2011

Flor de jara


Es ésta una mañana brumosa de un otoño que se nos ha presentado, en plena penuria económica, preñado de augurios que causan desasosiego. Promesas infundadas e imposibles, mentiras gordas como puños, comentarios imprudentes, noticias tergiversadas, opiniones rencorosas, jugadas de trileros, anuncios de catástrofes mediáticas... pululan por doquier.
En la sierra, sin embargo, a la jara del camino le ha nacido una flor. Cuando preparaba su cobijo para soportar los rigores del invierno. Sin que nadie lo esperara, le ha estallado en su ramaje una flor blanca, blanca, como las flores blancas. Sencilla, delicada, con el pelo recogido y los pétalos de su cara lavados con el rocío de la mañana. Y, mientras mueve su cintura esbelta, obsequia al caminante con una sonrisa alegre que llena de colores el gris verdoso de la loma.

¿Cómo es posible que ésto ocurra? ¿Será cosa del cambio climático? ¿Por qué no lo han previsto las encuestas? ¿Qué dice el FMI?, ¿y el BCE?, ¿y los mercados?, ¿y Bruselas?, ¿y la Merkel?, ¿y papá Sarkozy?, ¿lo ignorará Rubalcaba?, ¿irá en el programa ambiguo de Rajoy? ¡Insensatos!, siempre pensando en lo accesorio para hacernos felices a nuestra costa, penando por componer lo que estropearon sin dejar de estropear, sabiendo que se resolverá, porque siempre se resuelve, con, sin y a pesar de ellos. Y en cambio no atienden a lo importante, a lo insólito, a lo que verdaderamente mueve la naturaleza y el mundo.

Pues así ha sido, yo lo he visto. Igual que mi admirado maestro Antonio vio las hojas verdes que le salieron el olmo seco, hendido por el rayo, en su mitad podrido, yo he visto nacerle una flor blanca a una jara gris verdosa, no con las lluvias de abril y con el sol de mayo, sino con el frío brumoso de un noviembre arruinado por la crisis económica y el aburrimiento electoral.

5 comentarios:

  1. Has conseguido sacar de mis labios una sonrisa de esperanza. El ser humano aún puede salvarse de su propia verborrea, para encandilarse con lo más íntimo de su consciencia.
    Siento que los políticos cada vez engañan a menos y eso es bueno para todos. Acabaran por ser decentes los que esperan un futuro, estos ya no tienen futuro.

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  2. En medio del árido y resquebrajado paisaje urbano y mundial,aparece tu delicada flor de jara, de un blanco puro,para decirme que la belleza existe.

    Comparto tu emoción como si fuera mía -y lo es-porque se superpone a la que un día sentí cuando mi cactus abrió una espléndida flor amarilla en pleno otoño.Es la misma mirada, desde distintos ojos,y hacia distintas flores, pero, en esencia, es el mismo asombro ante la maravillosa audacia de la Naturaleza.
    He visto florecer plantas en diminutas rendijas, en pedregales,entre la hojarasca de otoño...Y recibo una lección de tenacidad, de audacia,y de esperanza.
    Así es la Naturaleza: sorpresiva, apasionada y bella.
    Luis, gracias por provocarme emociones con tu flor de jara.

    Un abrazo

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  3. Luis,¡con qué habilidad expresas dos realidades simultáneas, de significado opuesto!.En la descripción de una,me metes en el barro,me haces sentir el mal olor del agua estancada y corrompida. Y después,me trasladas a la sierra, a sus aromas silvestres y la blanca flor de jara desafiando " el frío brumoso de un noviembre arruinado por la crisis económica y el aburrimiento electoral". ¡¡Excelente!!.

    Aunque "primun vívere,deinde filosofare", coincido contigo en la importancia de saber encontrar la belleza de la flor de jara en circunstancias adversas.

    Un saludo.

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  4. Aprecio mucho su relato.Es algo así como poner un delicado ambientador -no de esos que se venden, que son artificiales y molestos- de flores silvestres para soportar los malos olores que desprende la realidad política-economica-social.

    Admiro su capacidad para fijarse en las pequeñas cosas y, si es sincera, la emoción que describe y nos trasmite.

    Un saludo.

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  5. ¡Qué belleza!¡Qué llamada a la esperanza!...Si sabemos mirar encontraremos siempre una flor de jara.
    Sus poesías y su prosa poética tienen algo especial.
    Saludos.

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