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24 de febrero de 2011

Siempre


Un día cualquiera me di cuenta que yo era
y que ella era conmigo, junto a mí, dentro de mí.
La miré, me miró, nos miramos
y decidimos andar en compañía
siempre,
no importa que llueva, ni que haga sol,
siempre,
cuando ría, cuando ame,
aunque llore y reniegue
aunque maldiga,
siempre,
Ahora está vieja, le cuesta andar.
Lo ha visto todo,
lo que importa,
y no le importa no ver más.
Me mira decidida en el ocaso.
¿Te vienes?
¡Pues claro! — le contesto —,
¿cómo no voy a ir
si eres mi vida?



8 comentarios:

  1. Precioso, emocionante, eso es Amor, Quijote.

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  2. Seguro que esa entrañable e inseparable compañía es quien comparte la vida contigo;es una suerte esa incondicional fidelidad.

    Me ha gustado mucho.

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  3. ¡Ay mis anónimas!, seguro que sois mujeres.
    Es tan frecuente llamar mi vida a la persona que amas que se adueñan realmente de su nombre, hasta tal punto que dejan innominada a la verdadera existencia.
    En este poema "mi vida" se refiere a la mía, a mi existir. En todo caso sería amor propio.
    Lamento cambiar el sentido de una declaración romántica por una reflexión filosófica.

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  4. Pues, Luis, tiene una existencia rarísima. Le mira, se miran, no quiere ver más y sale con ella, vieja y sin poder andar, de paseo. Oiga, que me está describiendo la muerte, no la exiatencia.
    ¿No será que intenta dar la vuelta a lo que, en un momento determinado, sintió?
    Mmmmmm...

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  5. Buena reflexión filosófica.Conversar con uno mismo es necesario,cuando se siente fatiga y la existencia reclama una pausa.
    Pero lo que me sorprende es esa pregunta: "¿Vamos"?...como si en algún momento se dudara de si continuar o abandonar.
    Existir no es difícil; llenar cada día de contenido la existencia, sí lo es.
    Y, en este blog nos dejas muestras de que,a pesar de los años, es posible.

    Un abrazo para llenar de amistad tu existencia.
    Fany

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  6. Hace muchísimo que no oigo llamar "mi vida" a la persona amada.Ahora dicen "cariño", incluso cuando no te quieren.
    Bueno, y...¿Por qué suponer que es a las mujeres a las que se les llama así?.

    ¿A usted no le han dicho nunca "mi vida" ?.¡Piénselo bien, y verá como sí !

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  7. El alma, la capacidad de pensar y de sentir es perdurable, pero el cuerpo, su soporte vital, es perecedero. En el poema quiero expresar la unión indisoluble y el final necesariamente compartido de ambos cuando el cuerpo se deteriora y muere: El cuerpo llama y el alma va. ¡No es nada sin su soporte!

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  8. Eso es lo que me impresiona:que todo nuestro bagaje cultural y "espiritual",tenga un soporte tan frágil y que todo acabe entre cenizas.

    Pero, en mi comentario bromeaba sobre una de sus respuestas "a sus queridas anónimas", a las que suponía mujeres como si de eso de "mi vida", solo ellas pudieran ser destinatarias.

    Saludos.

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